Primer cubano en el Salón de la Fama del softball
El entrenador Blas Armando Aguiar Gil recibió el anillo y la placa que lo convierten en el primer cubano miembro del Salón de la Fama de la Federación Internacional de Softbol (ISF), en acto celebrado durante su actual estancia como colaborador en Italia.
Aguiar fue preparador de Cuba en varios eventos internacionales, incluidos dos torneos preolímpicos, en uno de los cuales la isla aseguró su participación en los juegos de Sydney 2000.
El coach cubano, con un impresionante aval y de amplia trayectoria en el deporte, se encuentra ahora conduciendo cursos de entrenamiento en el país europeo.
La condición le fue otorgada desde el 2005, pero según plantea el Boletín Oficial Al Día, de la ISF, en la ocasión en que Don Porter, presidente de esa entidad, quiso venir a Cuba para su imposición, le fue negada la visa por el gobierno de Estados Unidos.
Por ello se aprovechó la presencia del caribeño para cumplir este acuerdo, aunque realizándose la ceremonia fuera del país natal del reconocido, algo inusual.
Esta inducción de Aguiar fuera de su país-hogar fue la alternativa ante una agresión más al deporte cubano, impedimento para que el acto oficial se efectuara como está establecido para todos los incorporados al Salón de la Fama ISF.
Aguiar fue preparador de Cuba en varios eventos internacionales, incluidos dos torneos preolímpicos, en uno de los cuales la isla aseguró su participación en los juegos de Sydney 2000.
El coach cubano, con un impresionante aval y de amplia trayectoria en el deporte, se encuentra ahora conduciendo cursos de entrenamiento en el país europeo.
La condición le fue otorgada desde el 2005, pero según plantea el Boletín Oficial Al Día, de la ISF, en la ocasión en que Don Porter, presidente de esa entidad, quiso venir a Cuba para su imposición, le fue negada la visa por el gobierno de Estados Unidos.
Por ello se aprovechó la presencia del caribeño para cumplir este acuerdo, aunque realizándose la ceremonia fuera del país natal del reconocido, algo inusual.
Esta inducción de Aguiar fuera de su país-hogar fue la alternativa ante una agresión más al deporte cubano, impedimento para que el acto oficial se efectuara como está establecido para todos los incorporados al Salón de la Fama ISF.
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